Parijs, vrijdag, 27 juni 2025.
La nueva ley comercial francesa, destinada a simplificar la vida económica, genera una inesperada resistencia entre los empresarios minoristas. El controvertido artículo 25 bis A introduce una serie de restricciones que pueden obstaculizar seriamente el desarrollo y la modernización de las tiendas. El Consejo Comercial Francés advierte que la ley, en lugar de simplificar, levanta obstáculos burocráticos adicionales para los comerciantes actuales y futuros. Estas consecuencias inesperadas pueden afectar significativamente la vitalidad económica del sector minorista, socavando completamente la intención original de reducción administrativa.
Alcance del Desafío Legal
El nuevo proyecto de ley para simplificar la vida económica, aprobado el 17 de junio por la Asamblea Nacional, genera una preocupación significativa en el sector minorista. El Conseil du Commerce de France (CdCF), que representa aproximadamente treinta asociaciones profesionales, ha emitido críticas severas sobre el artículo 25 bis A, que se espera obstaculice el desarrollo de las tiendas [1][2].
Barreras Burocráticas
La ley introduce complejidades administrativas inesperadas que reducen los umbrales de superficie de las tiendas y amplían los criterios de evaluación de las comisiones de desarrollo económico (CDAC). Esto amenaza con perturbar seriamente la dinámica económica de las empresas minoristas [3].
Sector Minorista bajo Presión
La Alianza del Comercio, una importante asociación sectorial, señala que estos cambios legislativos pueden debilitar la posición competitiva de los minoristas franceses. Investigaciones recientes demuestran que el sector ya está bajo presión por la competencia internacional, particularmente de plataformas como Temu y Shein [4].