Victoria’s Secret ha logrado un ligero aumento de sus ingresos en el segundo trimestre del año fiscal, gracias a una estrategia actualizada centrada en innovaciones de productos y una mejor experiencia del cliente.
Por encima de las expectativas
En las trece semanas que finalizaron el 2 de agosto, los ingresos netos de la empresa aumentaron un 3%, pasando de 1.420 millones de dólares (1.220 millones de euros) a 1.460 millones de dólares (1.250 millones de euros). Las ventas comparables aumentaron un 4%, con un comportamiento especialmente bueno del segmento internacional, que creció un 21,8%. Este resultado superó las expectativas previas de la dirección.
Sin embargo, los ingresos de explotación cayeron de 41 millones de dólares (34 millones de euros) a 62 millones de dólares (52 millones de euros), mientras que el beneficio neto disminuyó de 32 millones de dólares (27 millones de euros) a 16 millones de dólares (14 millones de euros), pero esto se atribuye a factores como la adquisición de Adore Me y la reestructuración del equipo directivo, dice la empresa. Sin estos factores, el resultado operativo fue de 55 millones de dólares (46 millones de euros), por encima de la previsión comunicada anteriormente.
Según la consejera delegada, Hillary Super, estos resultados reflejan el progreso inicial de la estrategia «Path to Potential», centrada en innovaciones de producto y en una mejor experiencia del cliente. Por ello, la empresa se muestra confiada a pesar de las inciertas condiciones macroeconómicas.
En el Benelux, la cadena de lencería cuenta con cinco tiendas: en las estaciones de Ámsterdam, Rotterdam y Utrecht, y en los aeropuertos de Schiphol y Bruselas.