J.M. Smucker, el grupo estadounidense propietario de la cadena de donuts Dunkin’, se ha visto muy afectado por los altos precios del café, mientras que los consumidores también pican menos. Como resultado, los sabrosos beneficios del año pasado se han convertido en agrias pérdidas.
Trump encarece aún más el café
El grupo alimentario estadounidense registró una pérdida neta de 44 millones de dólares (40 millones de euros) en el último trimestre. Un año antes, J.M. Smucker aún había registrado un beneficio de 185 millones de dólares (170 millones de euros) en el mismo periodo.
La escalada de los precios del café es la principal culpable: además de los precios históricamente altos de las materias primas, Donald Trump también impuso un impuesto de importación del 50 % a los granos de café brasileños. J.M. Smucker solo pudo repercutir parcialmente esos costes a los consumidores, por lo que, aunque las ventas de café aumentaron un 15 %, hasta 717 millones de dólares (650 millones de euros), los beneficios de la división cayeron un 22 %, hasta 134 millones de dólares (120 millones de euros).
Además, otras divisiones también se han visto afectadas por la actual coyuntura económica: las divisiones de aperitivos, bocadillos y alimentos para mascotas vieron disminuir sus ventas. En particular, el fabricante de galletas Hostess (más conocido por sus Twinkies) pesó en los resultados del grupo. Los consumidores optan cada vez más por alternativas más sanas, lo que debilita la demanda de snacks dulces. Aun así, J.M. Smucker confía en el futuro: a pesar del descenso de los beneficios, la empresa eleva su previsión de crecimiento de las ventas para el ejercicio en curso del 2 al 4 % al 3 al 5 %.