Las sucursales de la cadena de joyerías estadounidense Claire’ s van cayendo una a una. Ahora, la filial neerlandesa también ha solicitado protección frente a los acreedores. Las tiendas seguirán abiertas por ahora, pero la cuestión sigue siendo su viabilidad tras la quiebra de la matriz estadounidense.
Se busca una solución
Claire’s Holanda todavía no está en quiebra total, como la sucursal belga, entre otras: se ha nombrado un administrador para encontrar una solución, informan los medios holandeses. Sin embargo, las cosas no pintan bien para las nueve tiendas, ya que la empresa matriz se ha declarado en quiebra en Estados Unidos con arreglo al procedimiento del Capítulo 11.
La cadena de joyerías lleva bastante tiempo luchando con sus finanzas: en 2018, la empresa ya entró en bancarrota, pero pudo salvarse gracias a una fuerte reestructuración. Siete años después, negros nubarrones se ciernen de nuevo sobre la compañía con sede en Illinois, en referencia explícita a los aranceles a la importación de Donald Trump. La filial francesa fue la primera en hundirse, en julio.
