Deckers Brands, propietaria de marcas de calzado como Hoka y Ugg, ha logrado elevar sus ventas un 16,9%, hasta 964,5 millones de dólares (820 millones de euros), en el primer trimestre. Esto se debió a un crecimiento internacional de casi el 50 %.
Mejor de lo esperado
Este impresionante crecimiento se debe a dos marcas: La facturación de Hoka aumentó un 19,8 % y la de Ugg un 18,9 %. Las ventas de las demás marcas del grupo californiano -incluida Teva- cayeron un 19 %. Mientras que las ventas nacionales cayeron un 2,8 %, las internacionales crecieron un 49,7 %. El beneficio neto pasó de 115,6 millones de dólares el año pasado a 139,2 millones (120 millones de euros).
El Consejero Delegado, Stefano Caroti, se mostró exultante con los resultados de Hoka y Ugg, pero advirtió de que la incertidumbre sigue siendo alta en el comercio mundial: «Nuestra confianza en nuestras marcas no ha cambiado, y las oportunidades a largo plazo que tenemos por delante son significativas. Nos apoyaremos en las fortalezas fundamentales de nuestro potente modelo operativo para seguir ejecutando nuestra estrategia», añadió.