Un tribunal de París ha multado a Lidl con 43 millones de euros por infringir las normas de publicidad, después de que su competidor Intermarché presentara una denuncia. Si Carrefour hace lo mismo, esa cantidad aún puede aumentar.
Años de disputa legal
El núcleo de la disputa gira en torno a los anuncios de televisión sobre promociones: La ley francesa obliga a los minoristas a ofrecer los productos anunciados en toda su red de tiendas durante al menos quince semanas, pero Lidl declaró en los anuncios que la oferta sólo estaría disponible en 500 tiendas. Es decir, menos de un tercio de la red total de tiendas de la cadena de descuento en Francia.
En 2020, Intermarché y Carrefour acudieron por primera vez a los tribunales y ambas recibieron ya indemnizaciones millonarias. Sin embargo, como Lidl persistió, Intermarché lanzó un nuevo caso. Lidl fue absuelta en primera instancia, pero ahora el tribunal de apelación obliga a la cadena de descuento a pagar 43 millones de euros a Intermarché. En teoría, esa cantidad debería permitir al minorista responder a la campaña televisiva engañosa de Lidl con una campaña propia, informa la revista francesa LSA.
La sentencia es ejecutable inmediatamente, aunque Lidl aún puede recurrir. Según Olivier Dauvers, experto en comercio minorista, es probable que Carrefour también reclame otros daños y perjuicios.