Princesse Tam Tam y Comptoir des Cotonniers han solicitado protección judicial este viernes. La reorganización se produce después de que su propietario, Fast Retailing, llevara a cabo una importante reestructuración en 2023.
Difícil mercado francés
En 2023, se cerraron 55 de las 136 tiendas y se suprimieron 185 de los 507 empleos. Las dos marcas, especializadas en lencería y ropa de mujer respectivamente, pertenecen al grupo japonés Fast Retailing, del que Uniqlo es la marca insignia.
La solicitud de reorganización judicial confirma los graves problemas financieros a los que se enfrenta actualmente la distribución de moda francesa. Anteriormente quebraron empresas como Camaïeu, Naf Naf y, recientemente, Jennyfer.