El jueves estallaron huelgas en un pequeño número de supermercados belgas de Lidl: los empleados protestan porque no se han tomado medidas adecuadas para aliviar la carga de trabajo.
Alto absentismo
No hay movimiento huelguístico general en Lidl, pero algunos supermercados de Flandes, Bruselas y Valonia permanecieron cerrados el jueves, escribe L’Echo. Los almacenes no se vieron afectados. Según un portavoz, se vería afectado un número «mínimo» de tiendas. Los empleados de las tiendas abandonaron el trabajo después de que el martes fracasaran las consultas sobre la elevada carga de trabajo en el minorista.
La dirección de Lidl había propuesto un aumento de plantilla de cinco horas semanales durante cuatro meses para hacer frente al elevado absentismo. El minorista de descuento también se abstendría de ajustar las rayas por el momento, para aliviar al personal. Pero, según los sindicatos, estas medidas son insuficientes. El malestar por la elevada carga de trabajo persiste desde hace tiempo en la empresa. La semana pasada, los sindicatos ya bloquearon cinco centros de distribución de Lidl.