El fabricante neerlandés de calzado Van Lier ha cerrado sus siete tiendas con efecto inmediato. Las tiendas físicas son demasiado caras en la actual coyuntura del comercio minorista y «no están preparadas para el futuro», afirma la familia propietaria.
Tiendas físicas bajo presión
Van Lier sigue investigando si las tiendas de Groningen, Lelystad, Maastricht, Roosendaal, Rotterdam, La Haya y Utrecht «pueden continuar de otra manera«. Van Lier no explotaba directamente las tiendas, sino a través de un franquiciador, según informa el diario holandés Financieele Dagblad. Van Lier seguirá vendiendo sus zapatos a través de su propia tienda web y de tiendas multimarca (online y offline).
Hace apenas dos años, Van Lier acudió al Nxchange (bolsa de valores para pequeñas y medianas empresas), con la esperanza de obtener capital para digitalización, marketing y expansión internacional. Sin embargo, el rendimiento fue decepcionante y la promesa de crecimiento no se cumplió: la facturación apenas aumentó y, en lugar de beneficios, la empresa registró importantes pérdidas para el ejercicio 2023-2024. Van Lier no reveló la cuantía exacta de esa pérdida, pero llevó a ajustar los objetivos de crecimiento para 2024-2025.
El mes pasado, la consejera delegada Christina van Spaendonck dimitió, menos de dos años después de su nombramiento. Su padre, Geert van Spaendonck, propietario de la empresa familiar desde 1991, volvió a tomar las riendas tras su marcha. La familia espera volver a obtener beneficios a través de la digitalización y centrándose en las ventas en línea.