Por segunda vez en seis años, la cadena de moda Forever 21 se ha declarado en quiebra. Sólo afecta a sus operaciones en Estados Unidos. El minorista sufre la competencia del comercio electrónico.
Las filiales internacionales no se ven afectadas
Forever 21 ha iniciado de nuevo en EE.UU. el llamado procedimiento del Capítulo 11, una forma de protección de la deuda. La competencia de la moda ultramoderna de China se ha convertido en fatal para el minorista. La empresa ya ha puesto en marcha una gran liquidación en sus 350 tiendas de EE.UU. y se dice que está trabajando en un relanzamiento, cerrando tiendas y vendiendo partes. El minorista subraya que solo sus operaciones en EE. UU. se han visto afectadas: sus casi 200 tiendas internacionales, operadas por licenciatarios, no se han visto afectadas.
La marca también se declaró en bancarrota en 2019. A principios de 2020, fue adquirida por un consorcio en torno a Authentic Brands Group, que posee los derechos de la marca. El minorista llegó a tener tiendas en el Benelux, en Amberes, Bruselas, Ámsterdam y Rotterdam, pero cerraron hace años.
