Cada vez más empresas de moda ajustan sus objetivos climáticos o abandonan proyectos socialmente responsables. ¿Ha pasado de moda la sostenibilidad en un panorama social y político que establece otras prioridades? ¿O son fenómenos como el «greenhushing» los que enturbian la imagen?
«La moral está baja»
«La moral está baja», se escuchó en la reunión anual de Cascale, la antigua Sustainable Apparel Coalition, que representa al 40 % de la industria mundial de la confección. La lista de empresas que han rebajado sus objetivos de sostenibilidad sigue creciendo: Asos y Crocs abandonaron sus planes climáticos en 2023, y Nike eliminó un tercio de su equipo de sostenibilidad en 2024. Walmart tampoco cumplió sus objetivos de emisiones y Under Armour anunció este verano que no volvería a confirmar sus objetivos para 2030 y 2050.


