La muerte de Isak Andić, fundador de la cadena de ropa Mango, podría no deberse a una caída accidental. La policía catalana está investigando un posible asesinato y considera sospechoso a su hijo Jonathan.
Reapertura de la investigación
Una excursión por la montaña de Montserrat, cerca de Barcelona, tuvo un final trágico para Isak Andić el 14 de diciembre del año pasado. El empresario de 71 años, con un patrimonio estimado en cuatro mil millones de euros, resbaló a primera vista en un sendero y cayó 150 metros por un barranco. Su hijo Jonathan, que lo acompañaba, dijo que «oyó una caída», pero no vio nada porque caminaba unos metros por delante de su padre.