El fabricante belga de cerveza AB InBev, el mayor del mundo, ha superado sus expectativas de beneficios en el primer trimestre de 2025. La empresa lo calificó de fuerte comienzo de año, a pesar de que las ventas cayeron un 6,3%.
Preocupación en EE.UU. y China
Las ventas cayeron de 14.600 millones de dólares a 13.630 millones (12.700 millones de euros), lo que la empresa atribuye principalmente a los efectos de las divisas. Sobre una base comparable, las ventas aumentaron un 1,5 %: principalmente gracias a un incremento del 3,7 % en los ingresos por hectolitro. El EBITDA normalizado aumentó un 7,9%, hasta 4.860 millones de dólares (4.500 millones de euros), mientras que los analistas esperaban un incremento más modesto, del 3,1%.
No obstante, AB InBev sigue afrontando serios retos en Estados Unidos y China. Los volúmenes norteamericanos cayeron un 6,4 %, lo que se tradujo en un descenso de la facturación del 5,1 %. En China, la cervecera se enfrentó a un descenso del 9,2 % en volumen y del 12,7 % en facturación. Las difíciles condiciones económicas siguen lastrando los resultados.
América Latina y la región Europa/Oriente Medio/África aportan un contrapeso: en México, el resultado de explotación creció un 15 %, en Colombia un 10 % y en «EMEA» más de un 10 %, a pesar de la disminución de los volúmenes vendidos. En la cartera de marcas, las cervezas sin alcohol registraron un aumento de la facturación del 34 %.