La Comisión Europea ha iniciado una investigación formal sobre las prácticas desleales de Red Bull: el fabricante austriaco de bebidas energéticas habría abusado de su posición dominante como «líder de categoría» para perjudicar a sus competidores.
¿No solo en los Países Bajos?
La Comisión Europea afirma disponer de indicios de que Red Bull ha desarrollado una táctica para perjudicar a sus competidores en supermercados y tiendas de gasolineras. El fabricante habría ofrecido incentivos financieros y no financieros a los minoristas para que retiraran de su surtido los productos de la competencia con un contenido superior a 250 mililitros o los colocaran en lugares menos visibles.
En concreto, el fabricante habría abusado de su papel como «líder de categoría» para limitar la presencia de marcas competidoras. Para ello, Red Bull se habría centrado en las bebidas energéticas vendidas por su competidor más cercano. En el comunicado de prensa no se menciona el nombre de esta empresa, pero los entendidos dan por hecho que se trata de Monster.
Se trata de la primera investigación formal de la Comisión sobre un posible abuso relacionado con la posición de gestión de categoría de un proveedor. La Comisión teme que Red Bull haya aplicado esta estrategia perjudicial «al menos» en los Países Bajos. La investigación formal es consecuencia de un registro sin previo aviso realizado en marzo de 2023.


