En Alemania, Foodwatch ha concedido un «Goldene Windbeutel» a Mondelez: el fabricante de chocolate recibe el galardón por publicidad engañosa debido a los precios más altos de los envases más pequeños de Milka.
«Engaño legalizado al consumidor»
Con el Goldene Windbeutel, la organización de vigilancia alimentaria Foodwatch dice premiar «la mentira publicitaria más triunfante» del año. En una votación en línea, cerca de un tercio de los 58.000 participantes prefirieron el envase de chocolate Milka Alpenmilch de Mondelez, que se redujo de 100 a 90 gramos, mientras que el precio aumentó de 1,49 a 1,99 euros. Para los consumidores, eso significaba un aumento de precio del 48%.
«Mondelez engaña a la gente en el supermercado y gana mucho dinero. La contracción es un engaño legalizado al consumidor, y el gobierno está defraudando a la gente», afirma Chris Methmann, director de Foodwatch en Alemania, que señala que la información sobre el peso suele quedar oculta por el embalaje exterior de cartón.
También en los Países Bajos, la organización concede cada año el «Gouden Windei». El año pasado, el dudoso honor recayó en Albert Heijn por sus Lekkerbekjes: se descubrió que los aperitivos congelados contenían cada vez menos pescado y más corteza.
