A pesar del descenso de sus ingresos, la belga Le Pain Quotidien consiguió quintuplicar sus beneficios en 2024. La cadena belga de panaderías y restaurantes busca ahora una mayor expansión en todo el mundo a través de franquicias.
Calidad a pesar de la caída de ingresos
Le Pain Quotidien cerró su ejercicio 2024 con un descenso de los ingresos del 5 %, hasta 79,4 millones de euros. Este descenso puede explicarse en parte por el hecho de que algunas tiendas deficitarias del Reino Unido se incluyeron todavía temporalmente el año pasado. Sin embargo, el beneficio neto pasó de 0,75 millones de euros en 2023 a 3,73 millones de euros el año pasado, gracias a un enfoque más estricto de los costes y a una menor presión inversora gracias al modelo de franquicia, señala la consejera delegada Annick Van Overstraeten. De los 216 establecimientos en todo el mundo, sólo una treintena siguen siendo propiedad de la empresa, principalmente en Bélgica.
«La calidad de los resultados está mejorando«, afirma Van Overstraeten al diario belga De Tijd. La franquicia ayudará a la cadena a expandirse geográficamente: este año, la cadena tiene previsto abrir una treintena de nuevos establecimientos, entre ellos en Azerbaiyán, Congo, India, Kazajstán, Paraguay, Perú y Uzbekistán. «Hay un enorme potencial de primas en los mercados emergentes«, declaró el Consejero Delegado a RetailDetail el año pasado. Al mismo tiempo, unos cinco establecimientos cerrarán o se trasladarán. En Francia, Le Pain Quotidien quiere convertir sus dos últimos establecimientos propios en franquicias.
Además de los locales clásicos, Le Pain Quotidien también se está centrando en el comercio minorista de viajes. La presencia en aeropuertos y grandes estaciones de tren representa una importante área de crecimiento. Tras el éxito de su apertura en el aeropuerto de Bruselas, Le Pain Quotidien se ha expandido a la Gare de l’Est y a la Gare Montparnasse de París. En agosto se abrirá un nuevo establecimiento en el aeropuerto de Burdeos.