Tras una exhaustiva investigación que ha durado meses, la Comisión Europea ha llegado a la conclusión de que la adquisición de Kellanova (propietaria de Pringles y Kellogg’s) por parte de Mars no supone ningún riesgo para la competencia ni para los consumidores.
Aprobación incondicional
Después de que las autoridades estadounidenses de competencia dieran luz verde a la adquisición en junio, la Comisión Europea también ha dado este lunes su aprobación incondicional a la adquisición de Kellanova, el grupo detrás de las patatas fritas Pringles y los cereales Kellogg’s, por parte de Mars, el fabricante estadounidense de Mars, Snickers, Ben’s Original y Whiskas, entre otros. Así lo han confirmado hoy tanto la Comisión Europea como el fabricante en un comunicado de prensa. Como consecuencia, Kellanova desaparecerá de la bolsa de Nueva York.
La aprobación europea se produjo tras una investigación de varios meses sobre el poder de negociación de Mars frente a los minoristas europeos. Se temía que la multinacional estadounidense, al integrar las fuertes marcas de Kellanova, pudiera exigir precios más altos, lo que en última instancia perjudicaría a los consumidores europeos. Varios minoristas habían expresado su preocupación al respecto. Sin embargo, el análisis de la Comisión no indica que la operación refuerce la posición negociadora de Mars frente a los minoristas.


