Las cadenas de comida rápida estadounidenses siguen estando infrarrepresentadas en Bélgica: grandes empresas como Burger King, Domino’s y McDonald’ s tienen previsto abrir cientos de locales en los próximos años.
«Aún hay margen de crecimiento»
Bélgica cuenta actualmente con más de mil restaurantes de comida rápida de grandes cadenas, que tienen prevista una avalancha de nuevos locales. Según una encuesta de De Tijd, McDonald’s pretende duplicar con creces su red (de 122 a 150 locales) para finales de 2027, mientras que Domino’s tiene planes muy similares (de 127 a 250 sucursales). Burger King planea cincuenta nuevos restaurantes, mientras que KFC y O’Tacos también están ampliando su presencia de forma constante, pero no revelaron cifras concretas.
Los planes encajan en su estrategia europea más amplia: mientras que uno de cada tres estadounidenses come comida rápida en un día normal, esa cifra es significativamente más baja en Bélgica (21 %), según el centro de investigación Sciensano. Esto les deja margen para seguir creciendo: «Bélgica era un mercado infrarrepresentado. Todavía hay potencial de crecimiento para varios actores«, declaró Raffaele Daloiso, consejero delegado de McDonald’s, a De Tijd.
Batalla procesal por los permisos
Según Foodservice Alliance, los belgas gastarán casi mil millones de euros en comida rápida en 2023: es decir, casi un tercio más que en 2019. Sin embargo, el número de visitantes a establecimientos de comida rápida cayó un 8 % el año pasado. Debido a la inflación y al aumento de los precios, los ingresos disminuyeron un 9 % en comparación con 2023.
Sin embargo, sus ambiciosos planes de crecimiento también se enfrentan a obstáculos prácticos: la obtención de permisos resulta ser un impedimento particular. El procedimiento es cada vez más largo, mientras que las autoridades locales se oponen cada vez más a los nuevos establecimientos de comida rápida por temor a la basura, la congestión del tráfico y el impacto sanitario en sus residentes.