Spar suprime más de cincuenta puestos de trabajo en la sede central en los Paises Bajos: tanto los puestos directivos como los ejecutivos se ven afectados. No hay cambios para los empleados de las tiendas y el centro de distribución.
Reorganización
En los últimos años, Spar ha realizado importantes inversiones en sus más de 400 tiendas, pero estas se enfrentan ahora a dificultades debido a la prohibición del tabaco y al aumento de los costes energéticos y salariales. Por ello, la cadena debe recortar gastos y, en este contexto, está revisando el funcionamiento de la oficina de Waalwijk. Se racionalizarán los procesos para que los empresarios que gestionan las tiendas franquiciadas «tengan más libertad para emprender de forma independiente», afirma la cadena en un comunicado de prensa.
El director general, Ruud van Munster, califica las medidas de «radicales», «porque afectan personalmente a nuestros empleados. Al mismo tiempo, estamos convencidos de que son los planes adecuados para el futuro de SPAR». Al fin y al cabo, hay que reducir los costes, mientras que la cadena quiere invertir en reforzar su fórmula.
Tanto el comité de empresa como el sindicato han dado su visto bueno a la reestructuración prevista. Según Spar, esto debería traducirse en un plan social definitivo en breve. El sindicato CNV afirma que el acuerdo de principios provisional «supera en nivel lo que estamos acostumbrados en el sector minorista».


