Después de Francia y Bélgica, los Países Bajos también van a imponer un impuesto a los paquetes de comercio electrónico importados desde fuera de la Unión Europea. El precio medio de un pedido aumentaría así unos 6 euros.
2000 millones de euros al año
A partir del 1 de enero, la aduana neerlandesa impondrá un impuesto —en términos oficiales, una «tasa de tramitación» de 2 euros por línea de producto— a los paquetes procedentes de fuera de la UE con un valor de hasta 150 euros. Hasta ahora, estos estaban exentos de gastos de aduana. Dado que un paquete medio contiene tres productos diferentes, esto supone un aumento medio de los costes de 6 euros por pedido, según informa la NOS, que ha podido consultar el proyecto de ley.
Con la cantidad actual de paquetes que llegan a los Países Bajos, esto supondría 2000 millones de euros al año. Se trata, después de todo, de un millón de artículos al día, procedentes principalmente de tiendas online chinas como AliExpress, Temu y Shein. El Gobierno belga también decidió recientemente introducir un impuesto de 2 euros por los paquetes pequeños, al igual que Francia. Estos países no quieren esperar a que entre en vigor un impuesto europeo común, que probablemente no se aplicará hasta el 1 de noviembre del año que viene. Mientras tanto, los Países Bajos quieren evitar que la importación de paquetes chinos se desplace de Bélgica a Róterdam y Schiphol.


