Parijs, vrijdag, 6 juni 2025.
Las plataformas de comercio electrónico chinas Shein y Temu lanzan una ofensiva de marketing agresiva en Europa tras la introducción de aranceles de importación estadounidenses. Al desplazar las inversiones de marketing de EE. UU. hacia mercados europeos, estas plataformas crean desafíos significativos para las marcas de moda tradicionales europeas. El cambio estratégico de presupuestos de marketing tiene consecuencias directas en la visibilidad digital y las relaciones competitivas, enfrentando a las marcas europeas a costes de marketing crecientes y una prominencia online decreciente. Este desplazamiento marca una reorientación fundamental en las estrategias de venta minorista digital, donde las plataformas chinas reorientan su estrategia de expansión hacia un mercado europeo más fragmentado pero prometedor.
Desplazamiento de Marketing hacia Europa
Shein y Temu han adaptado drásticamente sus estrategias de marketing tras la introducción de aranceles de importación estadounidenses. Las plataformas aumentaron significativamente sus gastos publicitarios en Europa, con un incremento del 75 por ciento en países como Francia y el Reino Unido [1][2]. Este cambio es una respuesta directa a las nuevas barreras comerciales en Estados Unidos, mediante el cual ambas empresas desvían sus inversiones de marketing hacia el mercado europeo [3].
Desafíos para las Marcas Europeas
La llegada de estas plataformas de comercio electrónico chinas representa un serio desafío para las marcas de moda tradicionales europeas. Los costes publicitarios aumentan y la visibilidad online de las marcas establecidas disminuye [1]. Además, las plataformas chinas luchan con la compleja regulación europea, donde el 95 por ciento de los productos probados no cumple con los estándares europeos [4].
Perspectivas Futuras
A pesar de todo, las plataformas chinas siguen siendo ambiciosas. Temu aspira a generar el 80 por ciento de sus ventas europeas a través de vendedores locales [4]. Shein invierte 15 millones de dólares en seguridad de productos y control de calidad, con 2,5 millones de pruebas de productos [4]. Las plataformas ven Europa como un mercado prometedor, a pesar de los desafíos regulatorios [5].