Marcas de moda muy conocidas, como Nike y Adidas, permiten deliberadamente que se introduzcan en el mercado europeo versiones falsificadas de sus propios productos. Ellas mismas no quieren asumir el coste de destruir o reciclar las prendas.
Centro de falsificación
La falsificación -principalmente procedente de China- es un problema acuciante para el sector de la moda. Las copias baratas al contado de conocidas marcas de moda y lujo amenazan no sólo la reputación y el volumen de negocio de los productores, sino también la seguridad y la salud de los consumidores. Sin embargo, parece que bastantes marcas de moda optan simplemente por permitir que los productos falsificados interceptados por las aduanas entren en el mercado. Así se desprende de las investigaciones del programa de consumo «WinWin» de la emisora flamenca VRT 1.