Wolford comenzó el ejercicio fiscal 2025 bajo presión, ya que los persistentes problemas operativos lastraron las ventas. Los ingresos cayeron bruscamente en el primer semestre, pero la rentabilidad se mantuvo mejor de lo esperado gracias a los recortes de costes. La dirección señala que la recuperación debería empezar a notarse en el segundo semestre.
Fase de transición con mejores perspectivas
El fabricante austriaco de calcetería y confección registró una cifra de negocios de 33 millones de euros en el primer semestre, lo que supone un descenso interanual de 10,1 millones de euros. La empresa atribuye este descenso a los efectos de los retrasos en las entregas del año pasado y a los cierres temporales de tiendas. Aunque Wolford afirma haber resuelto los problemas subyacentes a finales de 2024, las secuelas siguen deprimiendo las ventas del primer trimestre de 2025.
El beneficio de explotación (EBIT) se mantuvo prácticamente en línea con el del año pasado, incluso después de la fuerte caída de los ingresos. La dirección atribuye la resistencia a una base de costes más reducida y al impacto de las recientes medidas de reestructuración y eficiencia.
Wolford afirma estar ejecutando una transformación operativa integral para restablecer la resistencia y la rentabilidad a largo plazo. Espera que los primeros signos de recuperación aparezcan en la segunda mitad del año. Para todo el año 2025, la empresa no prevé un impacto negativo significativo de la política comercial y el entorno macroeconómico en las ventas o los beneficios.